Cala Brafi o Cala Brafia está situada en Portocolom, una cala que ya visité el año pasado pero que este día el mar estaba movido y las fotos no eran demasiado buenas, no se apreciaba nada bien lo bonita que es esta cala. A veces las condiciones del mar y el viento hacen que una cala esté movida, que se ensucie la orilla de algas o de cosas que arrastra la marea, eso son cosas inevitables y a veces da rabia ir hasta esa cala que tu has visto fotos bonitas y que puede sorprenderte ese día por las malas condiciones del tiempo. Hoy os enseño de nuevo esta cala y la diferencia es abismal.
La playa de S’Algar no es una playa cualquiera, es la PLAYA con mayúsculas, un lugar de belleza sublime y aguas increíblemente transparentes, un tesoro situado en la zona de Portocolom y frecuentado por la gente de allí, descubrirlo ha sido maravilloso.
El Faro de Portocolom está situado en uno de los puertos naturales con más encanto de Mallorca, faro que además guarda una larga historia de tradición marinera además de ser de los pocos donde todavía vive su farero, Paco, al que tuve el placer de conocer en una visita guiada a este Faro que os contaba aquí. Otro lugar para visitar en Mallorca que no os podéis perder.
Cala Brafi o Brafia es una manga de mar que se introduce tierra adentro unos 130 metros, combinando las rocas de ambos lados, el paisaje virgen de la zona y una pequeña zona de arena donde disfrutar de una de estas calas menos conocidas porque no está indicada por los alrededores.
Está situada en el precioso puerto de Portocolom, a tan sólo 500 metros de Cala Marçal, y el camino de acceso es bien sencillo una vez que llegas al punto donde se aparca. Os cuento los detalles de esta cala que el año pasado me quedó pendiente y me perdí y por fin he podido llegar hasta ella.
camino al lado donde se aparca para ir a cala brafiCartel de Cala Brafi en el sendero
Portocolom es uno de los mayores puertos naturales de Mallorca, a tan sólo 11km de la villa a la que pertenece, Felanix, y a 60 km de Palma, es uno de los lugares que no podéis dejar de visitar en la isla. Su encanto reside en que aún se conserva intacta su estampa de puerto de pescadores, su artesanía y su propia gastronomía son otros de su reclamo, sin olvidar su impresionante Faro del que os hablé en un post con esa inolvidable visita guiada, que se alza a 42 metros a nivel del mar desde 1860.
Estamos hecho de pequeños sueños, que llenan nuestro día a día, y te hacen mantenerte en la mecha de la ilusión constante, pero los sueños hay que perseguirlos porque sino no llegan nunca a cumplirse.
Uno de esos pequeños sueños mios era visitar un Faro por dentro, entrar dentro de tu torre y contemplar el mar que ellos ven. Son unos privilegiados.Y gracias a la iniciativa de Faros de Baleares pude visitar el Faro de Portocolom, que además no lo conocía, y la experiencia fue de lo más enriquecedora. Tuvo tanto éxito inicial, que éramos un grupo de mas de 50 personas, y tuvieron que cerrar inscripciones, que lo hicieron a través de difusión en redes sociales Twitter y Facebook.
